Tras su lectura cierro los ojos y me traslado con la imaginación a la meseta de Guiza, tomo asiento en una terraza de un hotel cualquiera que se levantan en la zona del lugar donde se enclava su novela, para poder contemplar la Gran Esfinge, las pirámides de Keops, Kefrén y Micerinos. Desde allí voy a soñar con un mundo antiguo repleto de magia y misterio. Allí es más fácil inspirarse para escribir, tal como le ocurrió a Andy García, cuya novela surgió de un viaje al país de Kemet. No hay nada como pisar los escenarios de los libros que se escriben. Me imagino a su autor con su atuendo de investigador de campo sellando cada imagen y viviendo cada experiencia para recrear luego en su novela magistral. Andy García posee varios cursos de egiptología y sus conocimientos quedan plasmados en esta obra, su pasión por el Antiguo Egipto y la arqueología la plasma en sus novelas.

Sus textos trascienden fronteras y sus seguidores estamos de enhorabuena con  "Maldición en El Cairo". No sé qué tienen las novelas del escritor que atrapan desde el primer minuto. Será su manera de contar historias antiguas de dioses y momias combinando lo pretérito con lo contemporáneo con una frescura tan particular observada en toda su trayectoria novelística. Los personajes actuales en su novela son los simples mortales envueltos en misterios religiosos y magia nociva. Tal le pasó a su protagonista la joven y brillante egiptóloga que acepta el cargo de conservadora en el  Gran Museo Egipcio de El Cairo. Ella no cree en maldiciones, pero las estudia y no les tiene miedo. No obstante, los acontecimientos se van precipitando y es imposible no creer cuando te ves involucrado en una historia de sarcófagos sagrados y momias resucitadas tremendamente peligrosas a las que hay que volver al inframundo a toda costa, para evitar que su mal te atrape. Las momias transitan por las vidas cotidianas y pasean por museos, hoteles, pirámides y distintos lugares geográficos. Sólo los amuletos mágicos, las instrucciones de un viejo mago, podrán paralizar los instintos de este espíritu malvado. Y es que las maldiciones se hacen reales cuando alguien osa perturbar los sarcófagos antiguos de los sacerdotes egipcios o de los faraones.

El Libro de los muertos es muy recurrente en sus capítulos para eliminar el maleficio y alejar a las almas intranquilas y volverlas a reposar de nuevo en el inframundo de la Duat. Los egipcios creían en la inmortalidad del alma y por ello momificaban a sus muertos. En los tiempos remotos las personas interactuaban con los dioses y a ellos elevaban sus rezos. He viajado de mano de sus letras por un país maravilloso y he conocido conceptos y refrescado mi memoria con otros que ya conocía. Yo me quedo con la idea de "Maat" que encarna la Justicia en el panorama de una religión que cree en la inmortalidad del alma. La realidad supera la fantasía en la novela de Andy García, llegando un momento en que el lector se implica de tal modo que parece vivir una historia verídica. La imaginación del autor es desbordante, su prosa atrapa y el ritmo de sus letras tremendamente ágil. El autor está muy consolidado en su profesión de escritor y sus novelas son muchas ya sobre temática egipcia: "El hallazgo", "Yo, Akenatón ", y muchas otras. Los relatos cortos son fascinantes también. He de decir que el escritor siempre es sorpresivo en sus finales, y muchas veces deja la puerta abierta a la imaginación del lector. Verle en su salsa visitando excavaciones con su atuendo a lo Indiana Jones y con su sonrisa entusiasta le define. Prendada quedo en sus historias y feliz hoy por que el importante hallazgo en Sákkara de más de 100 sarcófagos repletos de tesoros hará sin duda activar su imaginación para traernos nuevas novelas. Gracias Andy García y felicitaciones por tus aportes literarios que recibimos con gran alegría.

Elvira López